A pesar de la popularidad de los videojuegos, mucha gente asocia a las personas que se aficionan a los juegos, es decir, los gamers, con algunas características negativas. Los jugadores deben enfrentarse a muchos estereotipos y a menudo son etiquetados como antisociales.
Según Kowert & amp; Oldmeadow (2012), “El gamer, según los estereotipos, es un hombre socialmente inepto, solitario, con una obsesión por los juegos».

Instantánea del episodio de Southpark «Make Love, Not Warcraft», temporada 10, episodio 8

Es evidente que una cierta tendencia antisocial es una característica que se atribuye frecuentemente a los gamers. Pero, ¿qué pasaría si afirmáramos que los juegos podrían, de hecho, mejorar las habilidades sociales de los jugadores? ¡Sigue leyendo para averiguar cómo!

Los juegos establecen conexiones sociales
Los juegos en línea ofrecen la oportunidad para que las personas se conecten con otros jugadores de todo el mundo. Y dado que estas personas ya tienen algo en común, es decir, el juego en sí, se crean amistades con mucha frecuencia. Según un estudio realizado por Kowert (2019), gracias a los video juegos, numerosos jugadores de World of Warcraft han ampliado su red social y recibir apoyo social fuera del mundo online. Otra investigación, realizada por Lai et al (2019), ha encontrado que muchas veces el juego puede funcionar como una “plataforma de redes sociales” y se pueden formar amistades reales ya que los jóvenes tienden a entablar amistad con otros basándose en intereses similares. Además, Sunberd (2018) apunta que las personas que juegan juegos en línea acostumbran a tener más amigos que las que no.
También debe tenerse en cuenta que los jugadores no tienen por qué jugar el mismo juego para conectarse entre sí. Plataformas como Steam y Battlenet, en las que se puede jugar a diferentes juegos, ofrecen una función de chat, en la que los jugadores se pueden comunicar sin la necesidad de participar en el mismo juego. También es frecuente tener abierta la plataforma de comunicación Discord para poder hablar con amigos mientras juegas.

Los juegos promueven la colaboración
Numerosos juegos se basan en la colaboración y el trabajo en equipo. Este tipo de juego suele animar a los jugadores a trabajar juntos para alcanzar un objetivo común. No importa si los jugadores juegan con sus amigos de la vida real o con personas que nunca han conocido en su vida. Estos juegos, que se llaman cooperativos, logran unir a la gente. Aghabeigi et al (2010) defienden que los juegos cooperativos fomentan la participación: muchos juegos fomentan que los jugadores se consulten entre sí, organicen un plan juntos para resolver los desafíos y se apoyen mutuamente.
Un buen ejemplo de juegos cooperativos populares es Left4Dead: es un juego multijugador de terror en la que se debe sobrevivir, y está ambientado durante un brote de zombis. Cada jugador toma el control de uno de los cuatro supervivientes y todos juntos luchan contra hordas de zombis. Los supervivientes pueden comunicarse entre sí a través de comandos de voz y comparten botiquines de primeros auxilios, pistolas, municiones y analgésicos. Los supervivientes se cuidan, se pueden curarse unos a otros y, en general, el juego es imposible de terminar sin cooperación, trabajo en equipo y buena comunicación. Cuando un superviviente se separa del equipo, es más probable que sea atacado por un monstruo, lo que subraya la naturaleza colaborativa del juego.

Captura de pantalla de Left 4 Dead 2

Gaming can strengthen the sense of community and well-being.

Los juegos pueden fortalecer el sentido de comunidad y bienestar. Compartir una experiencia con otros puede hacer que la persona se sienta más cómoda y familiarizada con ellos. Cuando esa experiencia es un videojuego, puede surgir un sentido de comunidad. Hay foros donde los jugadores de ciertos juegos se reúnen e interactúan, discuten e intercambian ideas, no solo sobre el juego, sino también sobre otros temas como películas, música, política y filosofía. Como ha afirmado Rheingold (2014) “En una comunidad virtual podemos ir directamente al lugar donde se discuten nuestros temas favoritos y luego conocer a personas que comparten nuestras pasiones”. De esa forma se puede generar un sentido de pertenencia, fundamental para el bienestar de todos los seres humanos.
También es posible ganar un sentido de comunidad a través del juego en sí. Según la psicóloga Dra. Jenny Fremlin (2020), ciertos juegos pueden “ofrecer a los jugadores la capacidad de interactuar tanto con extraños como con amigos, pasar tiempo juntos, lograr metas individuales y grupales y asumir responsabilidades”, fundamentos sobre los cuales se crea un sentido de comunidad puede ser fomentado. Además, este sentido de pertenencia también puede expandirse al mundo fuera de línea a través de reuniones y conferencias sobre el juego.

En resumen, los videojuegos pueden permitir a los jugadores hablar con otros y hacer amigos, algo que puede mejorar sus habilidades sociales y su estado emocional. Por supuesto, esto no significa que alguien deba pasar todo el día frente a una pantalla. Como en todo en la vida, la moderación es crucial para que una persona mantenga un equilibrio eficiente tanto dentro del mundo online como fuera.

Conferencia de Gaming

 

Recursos:

http://www.digra.org/wp-content/uploads/digital-library/12168.23066.pdf
https://www.researchgate.net/publication/316553677_Negative_Stereotypes_of_Online_Gamers_and_the_Communication_Consequences
https://builtin.com/media-gaming/online-gaming-social-benefits
https://link.springer.com/chapter/10.1007/978-3-642-38827-9_43
https://web.northeastern.edu/magy/conference/pap0815-el-nasr.pdf
https://en.wikipedia.org/wiki/Left_4_Dead
https://en.wikipedia.org/wiki/Mario_Kart
https://www.sciencedirect.com/science/article/abs/pii/S0747563217305939
https://journals.sagepub.com/doi/10.1177/0163443719853505
https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/12650566/

2021-06-22T11:10:39+00:00